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Parte 2
Las Preguntas
5. ¿Podría el Rapto ocurrir al final de la Tribulación, como una etapa en la Segunda Venida del Señor?
Esto es lo que a menudo se denomina burlonamente como el “Rapto Yo-Yo”, porque muestra a los creyentes siendo llevados a los cielos para recibir al Señor, y luego regresar inmediatamente a la tierra con Él.
De nuevo, este concepto somete a la Iglesia a los siete años completos de la ira de Dios durante la Tribulación. También destruye la inminencia.
El Rapto está representado en las Escrituras con el Novio (Jesús) viniendo por Su Novia (la Iglesia). Este punto de vista Post-Trib del Rapto presenta un concepto deformado del Novio golpeando a Su Novia durante siete años, ¡y luego viniendo por ella!
En una de nuestras conferencias bíblicas anuales, el gran maestro de la Biblia, Ron Rhodes, abordó este concepto Post-Trib del Rapto de esta manera:11
Imaginemos por un momento que el Post-Tribulacionismo es cierto. Esto es lo que dice este punto de vista del Rapto:
- Pasarás por los siete años de la ira de Dios.
- Sufrirás el terrible reinado del Anticristo.
- Experimentarás los agonizantes Juicios de los Sellos, las Trompetas y las Copas — que empeorarán progresivamente y serán cada vez más dolorosos.
- La mayoría de ustedes morirán de formas dolorosas como mártires.
“Por tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras” (1 Tesalonicenses 4:18).
Lo siento amigos — ¡esto simplemente no funciona!
Hay otro problema muy serio con el punto de vista Post-Tribulación: ¡no provee una población para el Milenio! Déjenme explicarlo.
La Biblia enseña que, en la Segunda Venida, Jesús va a venir a juzgar a todas las personas que quedaron vivas en ese momento — al final de la Tribulación (Mateo 25:31-46; Ezequiel 20:33-38). Los salvos entrarán al Milenio en sus cuerpos y comenzarán a repoblar el mundo. Los salvos que fueron arrebatados al comienzo de la Tribulación, serán dispersados por todo el mundo para reinar con Jesús en sus cuerpos glorificados.
Todos aquellos que han resistido al Señor hasta el final de la Tribulación, serán condenados a muerte.
Ahora, si el Rapto ocurre al mismo tiempo que la Segunda Venida, como parte de la Segunda Venida, ¡no habrá nadie para entrar al Milenio en su cuerpo! Todos los salvos habrán recibido cuerpos glorificados en el Rapto, y todos los que no sean salvos habrán sido enviados al Hades.
La única forma de tener una población en sus cuerpos físicos en el Milenio es que el Rapto ocurra en un momento anterior y aparte de la Segunda Venida.
6. ¿Es 1 primera de Tesalonicenses 4 el único pasaje del Rapto contenido en el Nuevo Testamento?
De ningún modo.
Jesús se refirió al Rapto en Juan 14 cuando dijo:
1) “No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí.
2) En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.
3) Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis.
4) Y sabéis a dónde voy, y sabéis el camino”.
¿Cómo sabemos que Jesús está hablando aquí del Rapto? Porque dice que se llevará a los creyentes al Cielo. Si estuviera hablando acerca de la Segunda Venida, se enfocaría en los creyentes reinando con Él aquí en la tierra.
Otro pasaje del Rapto se puede encontrar en 1 Corintios 15. El apóstol Pablo habla acerca del Rapto cuando revela lo que él llama un “misterio” (versículo 51). Él afirma que, “No todos dormiremos [un eufemismo bíblico para la muerte]; pero todos seremos transformados” (versículo 51). Lo que él está diciendo aquí es que no todos nosotros vamos a morir, sino que todos los creyentes van a ser cambiados de mortales a inmortales.
Esto es exactamente lo que se enseña en 1 Tesalonicenses 4:13-18. Los que están muertos en Cristo serán resucitados y glorificados. Los creyentes vivos no probarán la muerte. Serán arrebatados para encontrarse con Jesús en el aire y, para que, en el camino, “esto mortal se vista de inmortalidad” (1 Corintios 15:53).
En su carta a Tito, Pablo lo exhortó (y a nosotros) a vivir “aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo” (Tito 2:13). Note que este versículo se refiere a la “aparición” del Señor, y no a Su venida a la tierra. Tampoco hace referencia al juicio, que ocurrirá en la Segunda Venida.
En 2 Tesalonicenses capítulo 2, Pablo dice que la aparición del Anticristo está siendo restringida y que “el inicuo” no será revelado hasta que el que lo detiene “sea quitado de en medio” (versículos 6-8). Entonces, hay un retenedor del mal que debe ser removido del mundo antes de que la Tribulación pueda comenzar. ¿Quién es ese retenedor? ¿Quién más podría ser sino el Espíritu Santo obrando a través de la Iglesia? Cuando la Iglesia sea removida en el Rapto, el Anticristo aparecerá en el escenario y la maldad explotará en todo el mundo.
En ese mismo capítulo — 2 Tesalonicenses 2 — creo que Pablo presenta otra declaración concerniente al Rapto, que también indica que el Rapto ocurrirá antes de que la Tribulación comience. Se encuentra en el versículo 3, donde declara: “Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá [“el día del Señor del versículo 2] sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición”.
En este versículo, Pablo está diciendo que “el día del Señor”, que es el período de la Tribulación y el Milenio, no vendrá hasta que “venga la apostasía”. ¿Qué tiene esto que ver con un Rapto Pre-Trib? Es el hecho de que la palabra, apostasía, es una interpretación y no una traducción.
La palabra griega que se usa en este versículo significa “partida”. Tommy Ice, el director del Centro para el Estudio del Pre-Tribulacionismo, ha señalado que las primeras siete traducciones inglesas de la Biblia, tradujeron la palabra como “partida”. Eran las siguientes:12
1) La Biblia Wycliffe (1384)
2) La Biblia Tyndale (1526)
3) La Biblia Coverdale (1535)
4) La Biblia Cranmer (1539)
5) La Gran Biblia (1540)
6) La Biblia Beeches (1576)
7) La Biblia de Ginebra (1608)
Además, la Biblia usada por el mundo occidental desde el año 400 d.C. hasta los años 16o0s — la traducción latina de Jerónimo conocida como “La Vulgata” — tradujo la palabra griega con una palabra latina, que significa “partida”.
La primera traducción de la palabra con el significado de apostasía en una Biblia inglesa no ocurrió hasta 1611, cuando se emitió la Versión King James. Así que, ¿por qué los traductores de la Versión King James introdujeron un significado completamente nuevo de la palabra como “apostasía”? La mejor conjetura es que ellos estaban dando una puñalada a las falsas enseñanzas del catolicismo.
Otra indicación de que Pablo está hablando acerca de la partida de la Iglesia de este mundo, y no de una partida de la Iglesia de la ortodoxia doctrinal, es el hecho de que se usa un artículo definido con la palabra griega, lo que la convierte en “la partida”.
Esto indica que Pablo estaba apuntando a un tipo particular de partida, con la que la iglesia de Tesalónica estaba familiarizada — a saber, el Rapto.
7. ¿Hay alguna mención del Rapto en el Antiguo Testamento?
No específicamente, que es la razón por la que Pablo se refirió al Rapto en 1 Corintios 15:52 como un “misterio”, que significa que era algo que no estaba claramente revelado en las Escrituras hebreas.
La razón por la que el Rapto no fue revelado en el Antiguo Testamento es porque es una promesa para los santos de la Era de la Iglesia, y no para aquellos creyentes que vivieron antes del establecimiento de la Iglesia. Los creyentes que vivieron en los tiempos del Antiguo Testamento — tanto judíos como gentiles — resucitarán al final de la Tribulación, cuando Jesús regrese a esta tierra en la Segunda Venida (Daniel 12:1-2).
Pero, como ha señalado el erudito de la profecía, Jim Tetlow, las Escrituras hebreas contienen “sombras” del Rapto.13 Él se refiere a Romanos 15:4, que dice, “Porque las cosas que se escribieron antes [en el Antiguo Testamento], para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de que por la paciencia y la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza”. Luego añade: “Aunque el Rapto estaba escondido en parte para los creyentes del Antiguo Testamento, los tipos simbólicos encontrados a lo largo de él, presagian un Rapto futuro cuando Dios removerá a Su pueblo antes de derramar Su ira en mundo que rechaza a Cristo”.
Por consiguiente, tipos simbólicos del Rapto se pueden encontrar a lo largo de las Escrituras hebreas. Por ejemplo, como he señalado antes, Enoc, un gentil símbolo de la Iglesia, fue sacado del mundo antes del Diluvio de Noé, mientras que Noé y su familia, representantes del remanente judío, fueron dejados en la tierra, pero fueron protegidos a través de la calamidad.
Y de nuevo, el principio del Rapto también se puede encontrar en la historia de Lot y su familia, todos los cuales fueron librados de Sodoma y Gomorra, antes de que las ciudades fueran destruidas por Dios.
El apóstol Pedro se refirió a estos ejemplos en el capítulo 2 de su segunda epístola:
5) [Porque si Dios] no perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé, pregonero de justicia, con otras siete personas, trayendo el diluvio sobre el mundo de los impíos;
6) y si condenó por destrucción a las ciudades de Sodoma y de Gomorra, reduciéndolas a ceniza y poniéndolas de ejemplo a los que habían de vivir impíamente,
7) y libró al justo Lot, abrumado por la nefanda conducta de los malvados
9) sabe el Señor librar de tentación a los piadosos, y reservar a los injustos para ser castigados en el día del juicio
Tetlow procede a proporcionar varios otros ejemplos simbólicos del principio del Rapto, pero también señala dos pasajes de la Escritura, que presentan una posible imagen de un Rapto que precede a la Tribulación. El primer se encuentra en Isaías 26:
20) Anda, pueblo mío, entra en tus aposentos, cierra tras ti tus puertas; escóndete un poquito, por un momento, en tanto que pasa la indignación.
21) Porque he aquí que Jehová sale de su lugar para castigar al morador de la tierra por su maldad contra él; y la tierra descubrirá la sangre derramada sobre ella, y no encubrirá ya más a sus muertos.
El segundo es un pasaje que se encuentra en los escritos de los Profetas Menores — en Sofonías 2:
2) …antes que el día de la ira de Jehová venga sobre vosotros.
3) Buscad a Jehová todos los humildes de la tierra, los que pusisteis por obra su juicio; buscad justicia, buscad mansedumbre; quizá seréis guardados en el día del enojo de Jehová.
Estos dos pasajes son probablemente más relevantes para el hecho de que, durante la Tribulación, Dios va a esconder a un remanente judío en Edom, muy probablemente en Petra (Daniel 11:41; Apocalipsis 12:13-14). Pero sí demuestran el principio del Rapto, de protección para los creyentes de la ira de Dios.
Quizás una mejor ilustración del principio del Rapto se encuentra en Isaías 57:1, que dice lo siguiente: “Perece el justo, y no hay quien piense en ello; y los piadosos mueren, y no hay quien entienda que de delante de la aflicción es quitado el justo”.
8. Si el Rapto va a ocurrir antes del comienzo de la Tribulación, ¿significa eso que van a haber dos Segundas Venidas del Señor?
No, significa que la Segunda Venida va a ocurrir en dos etapas — primero, el Rapto antes de la Tribulación, y luego el Regreso del Señor al final de la Tribulación.
Me recuerda una situación similar en el Antiguo Testamento. Los profetas hebreos, al hablar del Mesías venidero, pintaban dos cuadros diferentes de Él. En algunos pasajes era presentado como un Cordero Sufriente (Isaías 53:2-10). Pero, en otros, era representado como un León Conquistador (Jeremías 25:30-31).
Para reconciliar estas imágenes en conflicto, los sabios judíos concluyeron que habría dos Mesías. Uno sería Mesías ben José (el pastoral). El otro sería Mesías ben David (el guerrero).
Pero estaban equivocados. Los pasajes no estaban hablando de dos Mesías. Más bien, predecían que el Mesías vendría dos veces, la primera como el Cordero Sufriente, para morir por los pecados de la humanidad y, luego, posteriormente, como el León Conquistador, para gobernar el mundo en gloria y majestad.
Por lo tanto, así como la venida del Señor en la profecía del Antiguo Testamento fue retratada en dos etapas, de igual manera, el regreso del Señor en la profecía del Nuevo Testamento está representado en dos etapas.
9. ¿Qué acerca de los santos del Antiguo Testamento? ¿Van a ser incluidos en el Rapto?
No. El Rapto es una promesa a la Iglesia. Sólo aquellos que pongan su fe en Jesús durante la Era de la Iglesia, tanto los vivos como los muertos, serán incluidos en el Rapto.
Los santos del Antiguo Testamento serán resucitados al final de la Tribulación, y recibirán sus cuerpos glorificados en ese momento. Esto se enseña claramente en Daniel capítulo 12, donde se nos dice que su resurrección ocurrirá después del “tiempo de angustia, cual nunca fue desde que hubo gente hasta entonces…” (Daniel 12:1).
Los mártires de la Tribulación también serán resucitados al mismo tiempo que los santos del Antiguo Testamento, al final de la Tribulación. Ambos grupos recibirán sus cuerpos glorificados en ese momento.
10. Sigue hablando de los creyentes de la Era de la Iglesia recibiendo cuerpos glorificados al momento del Rapto. ¿Qué es un cuerpo glorificado?
Ésta es una pregunta difícil de responder con certeza. Pablo dedica 24 versículos a este tema en 1 Corintios 15:35-58. Él aclara algunas cosas, pero no todas.14
Él declara que será un “cuerpo imperecedero”, que será levantado en “gloria” y “poder” (versículo 43). También declara que será un “cuerpo espiritual” (versículo 46), pero sabemos que esto no significa que será de naturaleza inmaterial, porque los espíritus no tienen cuerpos, y se nos dice en Filipenses 3:21, que nuestro cuerpo glorificado será un cuerpo como el que Jesús tenía después de Su resurrección.
Cuando Jesús se apareció a Sus discípulos después de Su resurrección, su cuerpo glorificado fue tangible y reconocible (Lucas 24:36-39). También comió con Sus discípulos (Lucas 24:41-43; Juan 21:9-13). Pero Su cuerpo glorificado tenía una dimensión diferente, porque podía aparecer y desaparecer a voluntad. También parecía moverse a gran velocidad, porque estaba en Jerusalén en un momento y luego aparecía, al poco tiempo después, en Galilea (Juan 21:1-7).
Así pues, nuestros cuerpos glorificados serán similares a los que tenemos ahora, pero también diferentes. Serán imperecederos, gloriosos, poderosos y espirituales — pero no en el sentido de ser un espíritu. Más bien, lo más probable es que sean “espirituales” en el sentido de que estarán completamente sometidos a la guía del Espíritu Santo.
Y cuando Pablo habla de nuestros cuerpos glorificados siendo poderosos, lo más probable es que se refiera al hecho que, como el cuerpo resucitado de Jesús, tendrán una dimensión diferente, lo que nos permitirá hacer cosas que no son posibles en nuestros cuerpos presentes — como aparecer y desaparecer y movernos a gran velocidad. Está idea está implícita en Filipenses 3:21, donde Pablo escribió que cuando seamos resucitados, Jesús “transformará el cuerpo de la humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la gloria suya, por el poder con el cual puede también sujetar a sí mismo todas las cosas”.
Lo más importante para mí es el hecho de que Pablo enfatiza que nuestros cuerpos perecederos actuales se volverán “imperecederos” (1 Corintios 15:53-54). Como tal, nuestros cuerpos ya no estarán sujetos a las enfermedades, al dolor y la muerte.
Nuestros cuerpos glorificados también serán perfectos. Se nos dice en Isaías 35:5-6 que “los ojos de los ciegos serán abiertos, y los oídos de los sordos se abrirán”. Además, “el cojo saltará como un ciervo, y cantará la lengua del mudo”.
Pasajes de las Escrituras como éstos, nos ayudan a vislumbrar el significado de la declaración de Pablo en el libro de Romanos, donde escribió: “Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse”.
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Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)